Isemay 41.7
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Osmar estaba sentado frente a Olaft y sujetaba el tazón del desayuno del
niño entre sus manos, el pequeño parecía divertido por algo que su padre le
había estado contando, pues sonreía con mucho entusiasmo.
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No sabía que estabas aquí- se disculpó para volver a su
cuarto.
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Quería hablar contigo- la dijo antes de que se marchara
y su tono de voz hizo que ella se volviera para mirarle- Sé que te marchar al
atardecer, y que no regresas con Reynald- la confesó.
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No sabía que mi primo se había puesto de tu parte-
replicó ella.
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No se lo pedí, solo me dio la información, creo que
tengo derecho a saber dónde va a estar mi hijo.
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Lo traeré de vuelta, si es lo que te preocupa.
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No lo dudo, jamás he dudado de tu palabra- la informó-
Solo quería que supieras que te daré la nulidad- la sorprendió y la dejó sin
habla a su vez- No voy a importunarte más con mi presencia, no quiero que
pienses que utilizo al niño para acercarme a ti, y tampoco me malinterpretes, que
tengas la nulidad no implicará que yo desaparezca de tu vida por completo.
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Había renunciado a ella- consiguió decir por fín
saliendo de su sorpresa- ¿Por qué el cambio de opinión?
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Porque quiero empezar de cero.
Comentarios
Saludos profe
Me parece bien.
un besote profe
Orthos, esperemos que funcione esa nueva cuenta desde 0.
Un besazo.